Resulta imprescindible durante la etapa de
Educación Primaria fomentar el desarrollo de la competencia comunicativa. La
comunicación oral es uno de los puntos clave para el desarrollo de dicha
competencia y para mejorarla, podemos realizar diversas actividades, tanto de
gran grupo como individuales. En esta entrada planteo un ejemplo de debate que
podríamos realizar en el aula.
El tema escogido para la realización de dicho debate sería: “LA IMPORTANCIA DE
RESPETAR LAS NORMAS”. He escogido este tema pensando en niños
de 4º curso de Educación Primaria. A estas edades ya han comenzado a plantearse
preguntas de lo que está bien y está mal, o acerca de la libertad del ser humano
de hacer lo que quiera. Constantemente se les repiten numerosas normas que
deben cumplir ya sea de forma más específica en sus entornos más cercanos como
en el colegio o en sus casas, o de forma más general cuando hablamos de normas
sociales. Según Piaget, el desarrollo moral del niño y la aceptación de las
normas es algo progresivo. En un primer
momento y debido a su egocentrismo, el niño ignora la norma y se resiste a la
autoridad que contraría sus deseos, después pasa por una etapa autoritaria en
la que considera que para ser bueno debe obedecer y que el castigo es justo. Pero
en torno a la edad con la que vamos a trabajar, los niños ya conocen y aceptan
las normas como algo natural, bueno y organizador, dentro y fuera del aula.
Para realizar esta actividad, emplearemos el aula de referencia. La disposición
de las mesas será circular de manera en la que todos los participantes nos
veamos las caras, para que se fomente el diálogo y el ambiente resulte
estimulante. Trataremos de crear un ambiente de confianza y respeto en el que
todos los niños se sientan cómodos y participativos.
Al comenzar la
actividad se recordarán las normas básicas de respeto y convivencia:
1. Respeto el
turno de palabra.
2. Pido el turno
de palabra cuando quiera hablar levantando la mano.
3. Todas las
opiniones de los compañeros son válidas, las escucho y las respeto aunque no
las comparta.
4. Usamos el tono
de voz adecuado.
5. No olvidamos
que estamos en el aula y que debemos adecuar nuestro comportamiento para crear
un buen ambiente entre compañeros.
Estas normas serán el puto de partida perfecto para comenzar con el debate. El
tema se planteará realizando la pregunta ¿creéis que estas normas son
importantes para el buen funcionamiento de la clase? De esta forma y tras las
primeras intervenciones, presentaremos el tema de debate.
Las diferentes
preguntas de andamiaje que darán continuidad al diálogo serán:
·
¿Participáis en la creación de las normas en casa?
·
¿Pensáis que las deberían ser el resultado de un
acuerdo?
·
¿Creéis que en general son importantes las normas?
·
¿Qué ocurriría si no hubiese normas en el mundo y cada
uno hiciese lo que quisiese?
·
¿Qué se debería hacer para que las personas respetasen
las normas?
Debemos tener en cuenta dos perfiles
de niños que solemos encontrar en todas las aulas y a los que debemos prestar
especial atención, teniendo en cuenta la diversidad de la misma: el niño que no
participa y el niño que molesta constantemente. En cuanto al primero, trataremos
de que se sienta cómodo y nunca presionarle. Para buscar su participación
dirigiremos preguntas de forma directa a él en las que sepamos que controla el
tema y se sienta seguro. A su vez, y para hacerle sentir más seguro,
aprobaremos sus aportaciones tratando de mejorar su autoestima y buscaremos que
sus compañeros respondan a las ellas para que así se sienta dentro del diálogo
y poco a poco, sea él mismo quien busque la participación por propio impulso.
Por otro lado, en relación al niño que suele molestar, le recordaremos
constantemente las normas iniciales, aludiendo así al tema de diálogo, y reforzando sus conductas positivas y sin hacerle el centro de
atención ante sus conductas negativas.
Por último, evaluaremos la actividad
teniendo en cuenta la escucha activa, la participación en los momentos
adecuados, la coherencia de las aportaciones la claridad en la explicación y argumentación,
la vocalización, la pronunciación y el uso de la gramática. Se dará un feedback
a la clase teniendo en cuenta lo mencionado con anterioridad y ejemplificando
con alguna situación que nos haya llamado la atención, siempre en vista de la
mejora y del refuerzo de las situaciones positivas.
Por otro lado, trataremos de
rellenar una rúbrica por alumno, aunque al tratarse de un diálogo nos
centraremos en los aspectos que más llamen la atención de cada alumno. Los
alumnos también rellenarán la rúbrica realizando una autoevaluación de la
actividad.
|
4
|
3
|
2
|
1
|
PARTICIPACIÓN
|
Participa
mucho
|
Participa
poco
|
Participa
solo si se le pregunta de forma directa
|
No
participa nada
|
ARGUMENTACIÓN
|
Sus
argumentaciones y explicaciones aportan continuidad al tema de diálogo y son
muy adecuadas
|
Sus
argumentaciones y explicaciones son coherentes con el tema de diálogo
|
Sus
argumentaciones y explicaciones no son coherentes con el tema de diálogo
|
Sus
explicaciones no tienen que ver con el tema de diálogo
|
VOLUMEN
|
El volumen
es adecuado con la situación
|
Levanta
la voz demasiado
|
Habla
demasiado bajo
|
Habla
muy bajo, casi ni se le oye
|
PRONUNCIACIÓN
|
Pronuncia
las palabras correctamente y vocaliza bien
|
Pronuncia
correctamente pero su vocalización no es correcta
|
Comete
errores de pronunciación, aunque su vocalización es correcta
|
Comete
errores tanto de vocalización como de pronunciación.
|
TURNO DE PALABRA
|
Respeta
siempre el turno de palabra de forma paciente y sin perder la atención a las
aportaciones de sus compañeros
|
Respeta
el turno de palabra aunque pierde atención cuando esta a la espera de su
turno
|
Repeta
en ocasiones el turno de palabra
|
No respeta
nunca el turno de palabra
|
REFERENCIAS
LABAJO, I.
(2017). Apuntes Didáctica de la Lengua Española. CSEU La Salle.
RELAÑO, P.
(2017). Apuntes Conocimiento del Medio Social y Cultural en Educación Infantil.
CSEU La Salle.
Para que realmente sea una actividad de diálogo en gran grupo y no una simple sucesión de argumentaciones individuales, debes asegurarte de que cada respuesta que se dé, sea comentada, debatida, completada... entre todo el grupo hasta que se agote, antes de pasar a una idea nueva. De esta forma, no hay solo emisores individuales y sucesivos sino verdadero diálogo social. Déjalo claro en tu actividad porque puede parecer una pequeñez, pero es lo que diferencia un tipo de acto comunicativo de otro.
ResponderEliminar